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Iberdrola corta el suministro eléctrico a 132 apartamentos de l'Alfàs al no estar al corriente del pago en la factura única que les emite.

Las obras de la segunda línea del Metro de Sevilla son más improbables que la llegada de astronautas a Júpiter. El colapso presupuestario de las Administraciones es cada semana más abismal, ya no pueden disimular. A nadie le coge de sorpresa la confesión desde la Junta, al igual que el paso atrás del Gobierno central para demorarsine díe la SE-40. Les emplazo al 2025. Llegaremos antes a Marte que a Pino Montano.

Los impagados de la banca siguen creciendo, mientras se reduce el volumen total del crédito. La morosidad del sector, que en el mes de junio pulverizó su máximo histórico al escalar el 9,65% del importe de los préstamos -según cifras actualizadas del Banco de España- y ha vuelto a batir esta desafortunada marca al trepar en julio al 9,86%, a escasas centésimas del rotundo diez por ciento. Los aumentos se suceden mes tras mes desde hace trece, y la actual proporción casi supera en más de tres puntos y en un 36% el 6,93% de un año antes.

Los grandes poseedores de viviendas, como promotoras y bancos, son los principales morosos y los que más problemas crean a los particulares.

"Llevar una vida amargada lo puede hacer cualquiera, pero amargarse la vida a propósito es un arte que se aprende”, Paul Watzlawik. Esta frase viene que ni al pelo en la situación actual del sistema financiero español. Todos, absolutamente todos los intervinientes, conocían que se mentía en los datos, que los balances eran papel mojado y que la situación real era mucho más dura y complicada que lo que se quería dar a entender. Lo peor era permitir seguir valorando los activos inmobiliarios a su precio de adquisición o similar, con el fin de no dañar este estado de cosas.

Hay 20.000 millones en créditos solicitados para adquirir una vivienda que ahora no se pueden pagar.

Los juzgados reciben una avalancha de litigios por deudas como consecuencia de la crisis. Los 17 tribunales dedicados a estos asuntos reciben 8.500 causas en siete meses.

La tasa de morosidad del crédito concedido por las entidades financieras a empresas y familias españolas ha alcanzado el 10,12% en julio, con lo que marca un máximo histórico que supera a los alcanzados durante la crisis de los años 90, según datos recopilados por la Asociación Hipotecaria Española (AHE).